Una Maestra Excepcional

A lo largo del camino recorrido en nuestra formación, hermos tenido la oportunidad de conocer muchos maestros que se quedarán marcados en nuestros corazones y cada uno de ellos ha contribuido para el desarrollo de nuestros conocimientos, habilidades y actitudes docentes, pero muy especialmente una maestra que mediante su ejemplo nos ha ayudado a valorar e ir poco a poco enriqueciendo nuestro papel frente al grupo.

A pesar del poco tiempo que tenemos de conocerla, ya se ha ganado nuestro respeto, cariño y admiración, por su carisma, dedicación y compromiso como profesora y como persona. Son muchas las cualidades que la caracterizan, como su responsabilidad al preparar sus clases; a pesar de todas las demás ocupaciones que tiene a cargo, su vocación, paciencia, empatía y el empeño que dedica para que nosotros aprendamos.


El enorme trabajo que realiza esta maestra nos sirve de motivación para tratar de desempeñar la docencia de la mejor manera. Algo de suma importancia y aprendizaje que nos queda al estar en sus clases, es darnos cuenta que en la práctica docente podemos adoptar diferentes papeles, como ser amiga y compañera, tratando de ir más allá y descubrir los problemas o situaciones que viven y afectan a nuestros alumnos; pero el papel que nunca debemos dejar o hacer a un lado es el de SER maestros.




También nos ha dejado claro que para ser un buen maestro es indispensable hacer que nuestra actitud sobresalga; siempre definirnos y concebirnos a nosotros mismos como personas seguras y confiadas, logrando ésto mediante la preparación, pues siempre nos ha recalcado que un buen maestro se hace preparándose en todos los aspectos.


Algo que agradecemos de antemano, es que nos ha enseñado las cosas como realmente son, nos ha ayudado a reconocer nuestra profesión como la práctica profesional que es, así como todo lo que ésta conlleva. Es una maestra que nos ha brindado muchas herramientas en nuestro desempeño. Por eso la recordaremos y siempre tendremos en nuestra mente sus consejos.



Es un ejemplo a seguir y estamos seguras que muchos de los que estudian o estudiaron en la Escuela Normal saben de quién les estamos hablando; un gran elemento, una gran maestra, investigadora y sobretodo una grandísima persona, su nombre es Yadira Chacón Sotelo, quien con sus grandes aportaciones tiene hoy un lugar en nuestra mente y corazón.

Muchas Gracias Maestra!! : )